Tu ventana al detalle: conoce todas las partes de una ventana

• Tu ventana al detalle: conoce todas las partes de una ventana
• ¿Por qué es importante la elección correcta de mis ventanas?
• ¿Qué factores hay que tener en cuenta a la hora de elegir una ventana?
• ¿Por qué hay diferentes tipos de perfiles de ventanas? ¿Qué me lleva a elegir uno u otro?
• Costes de una ventana (producto, instalación y mano de obra)
• El papel de la ventanas en una vivienda

Fuente de la imagen: ©Hogarsense

1. Cámara de aire o gas: se denomina cámara de aire o gas al espacio que queda entre las dos hojas de vidrio. Los vidrios con cámaras pueden contener en su interior aire deshidratado o un gas que mejoran en gran medida el aislamiento. Dicha cámara mejora el grado de aislamiento térmico, protección solar, acústico y de seguridad. Por ejemplo, mientras que un vidrio simple tiene un valor U de unos 5,7W/m2ºK, uno con una cámara de 16mm, reduce su valor U hasta los 2,7 W/m2ºK. Cuando mayor es el espesor de la cámara mejor es su aislamiento.

2. El vidrio: esta parte de la ventana es una de las más importantes ya que, ocupa una buena parte de la superficie total. Cada tipo de vidrio tiene sus aplicaciones y propiedades. En una ventana podemos elegir, primero la composición y espesor de cada una de las láminas de vidrio, y por otro lado cuántas cámaras y que espesor pueden tener. El vidrio puede hacer variar el presupuesto de unas ventanas por eso es importante adecuarlo a las necesidades que tengamos. En cuanto a la composición de cada lámina de vidrio y si este lleva o no tratamientos aplicados, estos pueden ser los diferentes tipos:

4. Calzos de acristalamiento: son elementos que garantizan que las hojas de las ventanas cierren y abran a la perfección, sin que se se descuelguen con el paso del tiempo. Su adecuada colocación es fundamental para garantizar un buen aislamiento acústico. Donde el vidrio permanece correctamente suspendido sin entrar en contacto directo con los perfiles de la ventana.

5. Junquillo: el junquillo es la parte del perfil que va clipado al interior del marco de la hoja y cuya finalidad es mantener el vidrio perfectamente fijado a la ventana, para evitar posibles movimientos. El tamaño del junquillo será de mayor tamaño cuanto menor sea el espesor del vidrio. Por eso es importante consultar al instalador, sobre la posibilidad de incluir en la ventana determinado espesor de vidrio. Además, el junquillo tiene que ir cortado con una precisión muy exacta para que haga una unión perfecta en las esquinas.

6. Galce de hoja: en esta parte de la ventana van colocadas las cunas y los calzos de acristalar para posteriormente colocar el vidrio. Esta zona debe soportar el peso del vidrio y al igual que el galce del marco también en la hoja, tiene una ligera inclinación para facilitar la evacuación del agua que pudiera entrar en esta zona.

7. Refuerzo en la hoja: el refuerzo en la hoja es fundamental para mantener la rigidez de la ventana. La integración de un refuerzo de acero, u otro material de gran resistencia en el interior de los perfiles de PVC, dota a la ventana de una gran rigidez.

8. Canal de herraje: el canal de herraje es dónde van insertado los mecanismos de apertura y cierre de las ventanas. Existe una estandarización en la forma y tamaño de este canal por lo que no existen diferencias entre unos perfiles u otros. Por otro lado, sí que pueden existir diferencias en la calidad de los herrajes. Los herrajes están compuestos por piezas de acero de alta resistencia instaladas en el perímetro de las ventanas, que garantizan la funcionalidad, hermeticidad y seguridad del cierre.

9. Junta de cierre: las juntas de los perfiles son una de las partes que marcan la calidad, por lo cual deben mantener una adecuada elasticidad pero sin deformarse y perder propiedades con el paso del tiempo. Si una junta de cierre no es de una alta calidad, pudiera darse el caso de que esta se deforme con la presión constante que la hoja ejerce sobre el marco cuando está cerrada. El sistema más utilizado es el de doble junta: una junta por el exterior y una por el interior. Este sistema nos garantiza una perfecta estanqueidad en todo el perímetro.

10. Cámaras de aire de la hoja: la hoja de la ventana, al igual que el marco, está formada por varias cámaras de aire además de la cámara principal de refuerzo. Estas cámaras dan un gran valor de aislamiento al perfil de la hoja.

11. Perfil de marco interior: se denomina perfil de marco interior a la parte de la ventana fija, unida al muro o a otros bastidores de ventanas, mediante diferentes sistemas de fijación. Los perfiles pueden tener un acabado en una gama de colores lacados o foliados o incluso con una terminación simulando en color madera (cuando el perfil no sea de madera).

12. Sistemas de clipado: cada sistema de perfiles tiene su propio sistema de ensamblaje entre perfiles, lo cual permite la unión de diferentes bastidores de ventanas con el acople de diferentes perfiles de ángulo o perfiles auxiliares. Un detalle de adaptabilidad con respecto a los nuevos perfiles de ventanas.

13. Refuerzo de marco: incorporar un refuerzo en el marco, a pesar de que el marco va fijado al muro y para ciertas medidas pequeñas de ventanas pueden no tenerlo, con normalidad suele emplearse igualmente. Este refuerzo proporciona un mejor agarre de las bisagras que van directamente atornilladas tanto a los perfiles como al refuerzo interior.

14. Cámaras de aire del marco: las cámaras de aire son un elemento fundamental para incrementar el aislamiento térmico. Cuanto mayor sea el número de cámaras, mayor será el aislamiento térmico del perfil, es decir tendrá un valor U más bajo. Cuanto más ancho son los perfiles, nos permiten albergar un mayor número de cámaras.

15. Galce de marco: el galce en el marco es la zona donde pueden ir alojados las cunas y calzos de acristalamiento, cuando estamos hablando por ejemplo de una ventana fija. En el caso de esta sección que el marco no lleva vidrio, la función de este galce es facilitar la evacuación de la posible agua que pudiera entrar en esa zona del marco.

16. Desagüe de marco: a pesar del alto nivel de estanqueidad que proporcionan las juntas de la ventanas, es normal que pueda entrar algo de agua entre el interior del marco o la hoja. Pero si nuestra ventana contiene este sistema de desagüe, no supone para nada un problema. Es por eso, por lo que la hoja y el marco lleva unos huecos interiores que permiten evacuar hacia el exterior de la ventana esa posible entrada de agua.

17. Juntas de estanqueidad: la junta de estanqueidad es la encargada de garantizar un buen nivel de estanqueidad en la ventana. Por lo general, la función de ambas juntas es muy similar, pero también depende la clasificación de la ventana de su permeabilidad al aire y por lo tanto de su aislamiento acústico. Son las encargadas de impedir cualquier entrada de aire a través de la ventana.

18. Altura hidráulica: la altura hidráulica, es la zona de la cámara dónde se realizan los desagües tanto del marco como en la hoja de la ventana. La función de esta zona es permitir el desagüe de cualquier posible entrada de agua a los perfiles, hacia el exterior evitando que pase al resto de cámaras. Sobre todo de la cámara dónde está alojado ese refuerzo que siempre permanece estanco.

19. Juntas de acristalamiento: las juntas de acristalamiento están en contacto con el vidrio, tanto por su parte exterior como con su por su parte interior. Su función principal es mantener al vidrio en suspensión forma que éste no entre en contacto con ninguna parte rígida como los perfiles. Unas juntas de calidad deben mantener sus propiedades elásticas a lo largo del tiempo. Este punto es muy importante para mantener un alto aislamiento acústico de la ventana.

20. Perfil de hojas: se denomina hoja de la ventana la parte fija de la misma y es la parte más visible de la ventana. Va fijada al marco con un sistema de bisagras, albergando el sistema principal de herrajes.

La importancia de elegir correctamente las ventanas de tu hogar puede ser un proceso que lleve tiempo y cierto razonamiento. Es importante tener claro la necesidad que se desea satisfacer y una vez, lo tenemos claro, llega el momento de empezar a buscar las características que más se adapten. Una primera característica a tener en cuenta es la forma de apertura, dependiendo del espacio y el lugar disponible en la vivienda, tamaño y orientación de la ventana…

Después del sistema de apertura, también el sistema de perfiles es importante elegirlo correctamente. El perfil es el marco fijo que soporta el cristal y accesorios que rematan la ventana. Por otra parte, el material es también un elemento muy importante. Dependiendo de la zona geográfica en la que vivamos puede ser mejor un tipo de perfil u otro. En el mercado es posible encontrar varias opciones, como el aluminio, acero, madera, PVC, o incluso mixtos.

Conjuntamente, respecto a la parte movible, el tipo de vidrio es de importancia también, ya que el conjunto del perfil y vidrio le dará los valores finales de aislamiento térmico, acústico y seguridad de la ventana. Debemos recordar que existen distintos tipos de vidrio, dependiendo del número de vidrios, el espesor del vidrio y la cámara. Podemos encontrar vidrio simple, doble acristalamiento o incluso, triple acristalamiento.

Por último, es posible encontrar en el mercado diversos colores, incluso con imitación madera. Y si tuviéramos que recomendarte un último punto a tener en cuenta es la instalación. Ya que una ventana mal instalada pierde todas sus propiedades térmicas y acústicas, además de resultar inseguras y antiestéticas, de ahí la importancia de buscar a los mejores profesionales instaladores.

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Los perfiles de ventanas son la parte estructural que nos dará resistencia mecánica y soporte al vidrio. Y será el elemento que realice la unión con la pared. Aunque una parte muy importante sea el cristal, no debemos olvidar que el perfil corresponde con un 30% del total de la superficie aproximadamente. Además, la perfilería que conforma el marco de la ventana, y las hojas, nos facilita tener múltiples opciones de apertura. Cosa que las ventanas sin marco no permiten. De ahí que sea un elemento muy importante para evitar filtraciones de aire o agua en días de lluvia.

Se pueden encontrar múltiples tipos de perfiles de ventanas que varían en función de diferentes criterios. Entre los que podemos observar se encuentran el tipo de material utilizado para los perfiles de ventanas, su espesor, o mejor dicho su capacidad de aislamiento térmico y acústico, o eficiencia energética, por el diseño de la propia ventana, etc. Entre los tipos de perfiles que podemos instalar se encuentran el aluminio, el PVC, la madera, el acero, el hierro, o mixtos. Y para decidirnos por uno u otro, te facilitamos algunas características de cada uno:

Fuente de la imagen: ©roventanasmadrid.es

➪ Perfiles de PVC: pueden clasificarse por varios aspectos, como son el número de cámaras que disponen en su interior, el espesor de sus diferentes paredes, tanto interiores como exteriores, y del número de juntas. Dependiendo de la elección, estaremos mejorando la eficiencia energética de la propia ventana, y por ende, de la vivienda.

➪ Perfiles de Madera: los perfiles de madera, nos aportan un alto grado de aislamiento, con lo que mejoramos sensiblemente la eficiencia energética de la vivienda, y con ello, nos aseguramos que consumiremos menos energía en la calefacción o aire acondicionado. Pero los perfiles de madera pueden tener diferentes criterios para su elección, bien por el tipo de madera, por su forma, y por su combinación.

➪ Perfiles mixtos: Los perfiles mixtos, pueden tener diferentes combinaciones de materiales. La combinación más usada es la de aluminio-madera, aunque también se puede encontrar las de PVC-madera, o incluso acero-madera.

➪ Perfiles de Aluminio, hierro o acero: pueden clasificarse por varios aspectos, como son la disposición o no de Rotura de Puente Térmico (RPT) y su espesor, el número de cámaras que disponen en su interior, la combinación con otros materiales como la madera y el PVC, y del número de juntas.

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Las ventanas siempre han sido un elemento con un gran impacto en el confort interior; de ahí que sea un elemento tan diferente en las distintas culturas y localizaciones (celosías, contraventanas, triples vidrios, …). En la antigüedad, lo más habitual era hacer ventanas muy pequeñas para mejorar la temperatura interior ya que, se había comprobado que eran un elemento de pérdidas térmicas. Este punto de inflexión y pérdidas energéticas cambió la historia de la edificación permitiendo que las carpintería y vidrios tengan transmitancias térmicas muy bajas, en lugar de hacer ventanas pequeñas para minimizar las pérdidas.

Actualmente, las ventanas son consideradas fuente de energía y luz, pero sólo cuando estás reúnen unas prestaciones de aislamiento y hermeticidad. Por ello, si queremos analizar en profundidad el papel que juegan las ventanas en nuestra vivienda debemos considerar 4 campos importantes: sistema de apertura, perfil y material, acristalamiento y nivel de hermeticidad.

Como es lógico, no se puede asegurar una cantidad exacta de años, ya que depende de diferentes factores, tanto internos como externos. Por un lado, hay muchos tipos y muchas calidades de perfiles y vidrios; y por el otro, el cuidado que tengamos, la zona donde las instalemos y el uso que le demos, marcarán la diferencia para bien o para mal de manera considerable.

No obstante, teniendo en cuenta la durabilidad de los diferentes tipos de materiales y nuestros conocimientos, podemos aproximar una media de 30-40 años para el aluminio o hierro, 50 años para materiales de PVC, y perfiles de madera hasta 30 años. Esto no quiere decir que siempre dure al menos 30 años, ya que es una media, como comentamos, pero sí que alrededor de esa cantidad estarán ofreciendo unos rendimientos eficientes de aislamiento y estanqueidad.

Cuando llegan temporadas en las que las temperaturas se sitúan más en los límites, podemos llegar a notar ese vientecillo helado que entra a través de las ventanas o por debajo de la puerta, que nos hace agarrar la manta y taparnos al completo. En momentos como estos nos planteamos que nuestras ventanas ya no aíslan térmicamente como antes y llegamos a la conclusión de que necesitan un cambio.

La causa principal de que entre o se escape la temperatura en nuestra vivienda recae sobre la deficiente calidad de la ventana instalada en nuestros hogares. Las ventanas al exterior son las zonas por donde se escapa todo el calor de la vivienda y por donde puede entrar una gran cantidad de frío. La solución que puede ayudarnos a reducir costes de calefacción, más eficiente y ecológica, tomando medidas de ahorro energético, es la de cambiar ventanas antiguas por unas nuevas con mejores prestaciones energéticas.

Si nos disponemos a cambiar las ventanas de nuestra vivienda debemos contemplar que la mejor época del año para hacerlo es antes de que llegue el calor, y antes de que llegue el frío. Es decir, al final de la primavera y principio del otoño. Aprovechando el entretiempo, se cambian las ventanas con el objetivo de preparar la casa para el verano y el invierno.