Mantenimiento del aire acondicionado frente al Coronavirus

• ¿En qué consiste la guía?
• Recomendaciones
• ¿Qué mantenimiento preventivo se debe realizar?
• ¿Qué pasa con las nuevas instalaciones?
• Ventajas de los sistemas de aire acondicionado (split, multisplit y por conductos)

Fuente de la imagen: ©istockphoto.com

La guía ha sido coordinada por técnicos del Ministerio de Sanidad, del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico y del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, con la participación de expertos en salud pública, sanidad ambiental, aerobiología e instalaciones de climatización y ventilación. Se ha tenido en cuenta las recomendaciones de las agencias internacionales, organizaciones profesionales y sociedades científicas. Puedes descargar la guía de operación y mantenimiento del aire acondicionado y ventilación de edificios y locales para la prevención de la propagación del Coronavirus, haciendo click en la siguiente imagen:

El documento establece recomendaciones, dirigidas a profesionales técnicos del sector, sobre el uso y el mantenimiento del aire acondicionado y los sistemas de ventilación o climatización en edificios y locales. Pueden ser oficinas, centros comerciales, instalaciones deportivas o culturales, entre otros. La guía también desarrolla una serie de criterios técnicos para proteger la salud pública, con el objetivo de prevenir la propagación del Coronavirus en espacios y locales públicos con ventilación o climatización mecánica.

Volver al menú de contenidos

Las recomendaciones que se establecen son las siguientes:

1. La guía enfatiza que la renovación de aire en los espacios cerrados es el parámetro más importante. Se recomienda por ocupante, tener un mínimo de 12,5 litros por segundo (l/s), que es el valor que el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios, el cual se atribuye un aire de buena calidad. Para asegurar este valor mínimo, se puede trabajar en dos direcciones: aumentar la ventilación o reducir la ocupación de los espacios.

2. Verificar que los equipos encargados de la renovación de aire trabajen, al menos, en sus condiciones nominales de diseño y que, las posibles pérdidas de carga, especialmente internas al sistema sean mínimas.

3. Si el sistema dispone de controles específicos de calidad de aire (sondas de CO2, detectores de humedad, etc.) se recomienda desconectarlos, dando prioridad al caudal del sistema (por horario). En concreto, en horario laboral, se aconseja trabajar con el caudal máximo que permita el sistema, horas antes de la apertura y horas después del cierre del local. En las horas restantes de la semana, incluido fines de semana, es preferible que el sistema continúe funcionando a bajo caudal, pero nunca a nivel inferior del 25% del caudal de aire nominal.

4. En aquellos dispositivos que sea posible, se recomienda eliminar o reducir la recirculación del aire siempre que las condiciones de operación lo permitan.

5. En relación a los recuperadores de calor rotativos, se aconseja realizar una inspección antes de ponerlos en funcionamiento. En los recuperadores de placas, por su parte, se recomienda verificar las posibles fugas.

6. Si existe un sistema de extracción específico para la zona de aseos u otras zonas anexas a la oficina -como, por ejemplo, vestuarios-, es recomendable mantenerlos activos de forma permanente.

7. Cuando el edificio, no disponga de sistemas de ventilación mecánica, la guía recomienda la apertura de ventanas accesibles, favoreciendo la ventilación cruzada. Se aconseja realizar una ventilación regular con ventanas incluso en edificios con ventilación mecánica.

8. Se recomienda no modificar la temperatura de consigna, ni de calefacción, ni de refrigeración.

9. Los rangos reglamentarios sobre humedad relativa, entre el 30-70%, se consideran adecuados, por lo que la guía aconseja mantener los puntos de consigna previamente establecidos.

10. En el caso de que encuentren instalados en el edificio fancoils, splits o cualquier tipo de inductores u otro tipo de unidades interiores de expansión directa, es aconsejable que estos dispositivos funcionen de manera acompasada y solidaria con las unidades exteriores. La guía recomienda aumentar, tanto como sea técnicamente posible, la filtración del aire recirculado si el equipo lo permite, y siempre y cuando se garantice el caudal de aire nominal del equipo.

11. Si el local presenta dificultades para obtener una ventilación satisfactoria, se aconseja el uso de unidades portátiles equipadas con filtros de alta eficiencia HEPA, ubicadas en los espacios a tratar. Es preciso que mantengan un índice de movimientos hora significativo. La eficacia de estos equipos depende de su correcta selección y dimensionamiento, por lo que se debe realizar por técnico competente. La guía recuerda que no se pueden usar equipos basados en la generación de ozono en locales con presencia de personas y, que la Organización Mundial de la Salud advierte contra la utilización de las lámparas UV-C para desinfectar las manos o cualquier otra superficie de la piel. Por tanto, no se recomienda su uso en ambientes en los que haya presencia de personas.

12. El documento considera las labores de mantenimiento del aire acondicionado tan relevantes como las de operación del sistema. Así, en el supuesto de aquellos edificios y establecimientos que hayan cerrado o cesado su actividad, es recomendable realizar una revisión general de la instalación de climatización antes de la reapertura, limpiando rejillas, difusores, filtros y baterías. Y si la instalación es de ventilación, es conveniente realizar un proceso de purga del aire interior tanto del edificio como del sistema, para lo que bastaría con el arranque del sistema de ventilación para ofrecer un número de renovaciones del aire interior adecuado.

13. La guía no considera preceptivo realizar la limpieza de los conductos si se siguen las recomendaciones anteriores sobre el aumento del aporte de aire exterior, ausencia de recirculación y parada de recuperadores rotativos. Esta recomendación no exime de la preceptiva revisión, una vez por temporada, de la red de conductos según los criterios de la norma UNE 100012.

14. Es aconsejable reemplazar los filtros de aire de acuerdo con el programa de mantenimiento del aire acondicionado ya establecido en cada edificio. Si el ventilador del equipo lo permite, se recomienda mejorar la eficacia de los filtros del aire acondicionado, siempre que se garantice el caudal de aire nominal del equipo.

15. El documento también estima conveniente revisar y limpiar las unidades de impulsión y retorno.

16. Las labores de mantenimiento del aire acondicionado deben realizarse de acuerdo con las medidas de seguridad establecidas en los protocolos de cada empresa y según las directrices del Ministerio de Sanidad. En concreto, la necesidad de actuar de forma segura en el caso de cambios de los filtros del aire acondicionado. Las medidas de protección serán las habituales, incluyendo protección respiratoria obligatoria y guantes para todas ellas.

17. Ante un posible caso positivo de coronavirus, se recomienda que el espacio donde se haya alojado la persona sea ventilado durante, al menos, cuatro horas. La ventilación debe comenzar al menos dos horas antes de iniciar las labores de desinfección. Dentro del protocolo de limpieza y desinfección del espacio, se recomienda incluir las rejillas de impulsión y retorno de aire; la extracción, la limpieza y desinfección del filtro de la unidad interior si la hubiera (fancoil, split); y la limpieza y desinfección de la unidad interior, si existe, pulverizando una solución desinfectante.

Volver al menú de contenidos

Para garantizar el correcto funcionamiento, es recomendable realizar una serie de tareas de mantenimiento del aire acondicionado. Con especial atención en las semanas previas a la puesta en marcha del sistema de climatización, tras un largo periodo apagado.

Los filtros del aire acondicionado son una de las cosas que más tienden a ensuciarse y estropearse, ya que son los principales en evitar que nuestro aire acondicionado se llene de partículas o polvo indeseado. Ten presente, indiferentemente del mantenimiento del aire acondicionado, cambiar con frecuencia estos filtros o de la limpieza de los mismos. Son muchos los aires acondicionados que presentan una anomalía en su funcionamiento y en la mayoría de los casos se debe a la limpieza de los filtros.

Comprueba el estado de la batería y límpiala. Está en la parte trasera de la unidad exterior y suele ensuciarse mucho. Desempólvala cuidadosamente y revisa que no haya ninguna anomalía. Puedes utilizar un cepillo suave y muchísimo cuidado. Los profesionales emplean aire a presión, pero no te lo recomiendo, porque sin su experiencia podrías doblar las aletas y perjudicar al equipo.

Son muchos los técnicos de aire acondicionado que comentan que muchos usuarios llaman con frecuencia ya que el aire acondicionado no enciende. Muchas veces suele ocurrir, que en el mando a distancia las pilas del mismo se han agotado, y solamente con el cambio de las mismas puede que el equipo funcione nuevamente.

Limpia los ventiladores exteriores. Son la salida del aire caliente, y debe permanecer libre de atascos y roturas. Un profesional te ayudará a limpiar estos tubos a fondo y comprobar que no tienen fisuras.

Confirma que el condensador no está bloqueado: comprueba que la parte que sale al exterior recibe suficiente aire de frente para funcionar con normalidad. Si no sabes verificar el correcto funcionamiento del mismo, te recomendamos contactar con un técnico en aire acondicionado lo antes posible y de esta forma evitar reparaciones del aire acondicionado y contagios por coronavirus.

Durante la noche o a primera hora de la mañana, airea y renueva el aire de la casa. Con la llegada del calor de nuevo, cierra puertas y ventanas. Te ayudará a ahorrar hasta un 30% en el consumo.

No provoques grandes subidas o bajadas del termostato. Esos picos son esfuerzos que obligamos a realizar a la máquina y que multiplican el gasto eléctrico y su desgaste. No bajes de los 25 en verano: cada grado que desciendas supone un aumento en el consumo eléctrico del 7%.

Volver al menú de contenidos

Las dudas nos surgen no sólo con la utilización y mantenimiento de nuestros sistemas de climatización, sino también, con la idea de llevar a cabo una instalación de un equipo de aire acondicionado en casa. Y es que el coronavirus ha modificado la forma en que vivimos y trabajamos a un ritmo vertiginoso. ¿Cómo puedo yo, como propietario o cliente, que quiere llevar a cabo un proyecto en casa, organizarme con el instalador o profesional sin correr riesgos? Por eso estas y otras preguntas las respondemos en nuestra "guía de buenas prácticas para clientes e instaladores".

Volver al menú de contenidos