Energía solar vs energía solar hidroeléctrica

• Energía solar vs hidráulica
• Tipos: de energía solar y de hidráulica
• Enfoque energético: calefacción y climatización
• Ventajas y desventajas de cada una

Fuente de la imagen: ©Hogarsense.es

La energía solar es una energía renovable, obtenida a partir del aprovechamiento de la radiación electromagnética procedente del Sol. La radiación solar que alcanza la Tierra ha sido aprovechada por el ser humano desde la antigüedad, mediante diferentes tipos de energía solar o tecnologías que han ido evolucionando. Actualmente, el calor y la luz del Sol puede aprovecharse por medio de diversos captadores como células fotoeléctricas, heliostatos o paneles solares térmicos, pudiendo transformarse en energía eléctrica o térmica.

El aprovechamiento de la energía solar se basa en la instalación de paneles solares, tanto térmicos como fotovoltaicos. El funcionamiento de estos tipos de energía solar es diferente. Mientras los térmicos utilizan un fluido para recoger el calor del sol y almacenarlo para su posterior utilización, bien como agua caliente o bien como valor para generar electricidad mediante una turbina y un generador. En cambio, los paneles fotovoltaicos están formados por un conjunto de células fotovoltaicas y basan su funcionamiento al efecto fotoeléctrico que se producen al incidir en ellos la luz solar.

Por su parte la energía hidráulica, energía hídrica o hidroeléctrica es aquella que se obtiene del aprovechamiento de las energías cinéticas y potenciales de la corriente del agua y saltos de agua ya que se necesita una combinación adecuada de lluvias y desniveles. Se puede transformar a muy diferentes escalas. Existen, desde hace siglos, pequeñas explotaciones en las que la corriente de un río, con una pequeña represa, mueve una rueda de palas y genera un movimiento aplicado generalmente a molinos o batanes, que podían ser para moler trigo u otros cereales, o para conducir agua a otras zonas. Sin embargo, la utilización más significativa, actualmente, la constituyen las centrales hidroeléctricas.

Fuente de la imagen: Wikipedia

El funcionamiento de las centrales hidroeléctricas o también llamada energía hidráulica, se basa en el movimiento que tiene el agua al dejarla caer por las presas o embalses de agua. Esta hace girar las aspas de grandes turbinas eléctricas para generar electricidad. En cuanto a la cantidad de instalaciones de cada tipo es muy difícil establecer el número de cada tipo de instalación que existen actualmente en el mundo, y también en España. Y para ello tendríamos que acotar por la energía eléctrica que pueden producir o algún otro parámetro.

Por lo que se refiere a la producción de electricidad, podemos acceder a diferentes fuentes, como por ejemplo a las estadísticas del Banco Mundial sobra la producción de electricidad a partir de fuentes hidroeléctricas, que en su último dato perteneciente al año 2015, nos indica que países como Noruega, Republica Democrática del Congo, Nepal o Namibia, producen más del 90% de su electricidad gracias a la energía hidráulica. Otros países como Brasil, Islandia, Colombia o Camerún producen más del 50% de su electricidad gracias a la energía hidráulica. Por su parte España tan solo es capaz de generar el 10% de su electricidad mediante la energía hidráulica.

Fuente de la imagen: Banco Mundial

Si revisamos los datos de producción de la energía solar, en especial de la fotovoltaica. Podemos encontrar datos sobre los 10 países con mayor generación de electricidad gracias a la energía solar fotovoltaica través de los datos recopilados por PowerWeb, en los que indica que en 2016 China ya generaba 34,5 GW, EEUU tenia una capacidad de 14,7 GW, Japón 8,6 GW, India 4 GW, Reino Unido 2 GW, Alemania 1,5 GW, Corea del Sur 0,9 GW, Australia y filipinas podían generar 0,8 GW y en la decima posición España con 0,7 GW instalados.

Cuando hablamos de tipos de energía solar o tipos de energía hidráulica, nos referimos a las diferentes tecnologías que utilizamos para aprovechar la energía que el sol o el agua nos ofrecen. Y dependiendo de que instalaciones usemos les damos un nombre u otro. Así, cuando hablamos de energía solar distinguimos diferentes tipos, por la tecnología que hemos desarrollado para aprovechar la energía procedente del sol.

• Energía solar pasiva: aprovecha el calor del sol sin necesidad de mecanismos o sistemas mecánicos. Simplemente adecuando nuestras viviendas de forma que saquen el máximo beneficio del sol.

• Energía solar térmica: para producir agua caliente, que la podemos usar para nuestros hogares como ACS en la calefacción, o para aplicaciones industriales.

• Energía solar fotovoltaica: generan electricidad directamente mediante placas fabricadas a base de semiconductores que reaccionan con la radiación solar.

• Energía solar termoeléctrica o termo solar de concentración: para producir electricidad con un ciclo termodinámico convencional a partir de un fluido calentado a alta temperatura (aceite térmico o vapor de agua).

• Energía solar híbrida: combina la energía solar con la energía obtenida de una central térmica tradicional, de biomasa, energía eólica o de combustibles fósiles.

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Centrándonos en temas más domésticos y que son más útiles para nuestros día a día, tenemos que referirnos a la utilización de estas energías en nuestras viviendas, de forma que podamos aprovecharlas directamente. De esta forma tenemos que decir que la energía hidráulica no podemos aprovecharla en la gran mayoría de los hogares. Salvo pequeñas instalaciones de energía minihidráulica que nos permiten electrificar una cabaña, un refugio o un hotel rural aislados de la red garantizando el suministro las 24 h del día y todos los días del año. Pero con la necesidad de estar junto a un torrente de agua continuo, o muy cerca de él. De esta forma generamos electricidad que utilizaremos en nuestra vivienda, tanto en iluminación, como para alimentar a los diferentes equipos o electrodomésticos, frigorífico, aire acondicionado, radiadores, etc.

En cambio, con la energía solar el aprovechamiento es más diversificado en función del tipo de instalación que dispongamos. Si tenemos una instalación de placas solares térmicas, obtendremos agua caliente que podemos utilizar para nuestra higiene o de la casa, o para la calefacción, bien sea por un suelo radiante o para atemperar el agua de nuestra piscina. Si tenemos una instalación de placas fotovoltaicas, generaremos electricidad directamente que usaremos a nuestra conveniencia, al igual que con la central minihidráulica. Para calentar agua, para iluminar nuestra vivienda o para climatizarla.

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