Cuál es la rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos

• Rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos
• ¿Son rentables las placas solares?
• ¿Cómo se calcula la rentabilidad de las placas solares?
• Período de amortización de una instalación fotovoltaica

Uno de los motivos por los que muchas personas pensamos en instalar placas solares es porque podemos amortizar la instalación y hacer que la inversión sea rentable. No obstante, esa rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos viene por diferentes vías. No solo se trata de recuperar el dinero que nos cuesta toda la instalación con todos los componentes fotovoltaicos necesarios, sino que nos aporte algo más.

Depende de cada uno de nosotros que veamos todos los beneficios y rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos, o solo consideremos los aspectos económicos. Aun así, algunos de esos factores que hacen viable nuestra instalación fotovoltaica los comentamos a continuación.

Cuando nos sumamos al autoconsumo y consumimos directamente la electricidad que generan las placas solares, ya no necesitamos la que proviene de la red eléctrica. Durante esas horas, estamos reduciendo la factura de la luz. Aunque el dinero que no pagamos a la comercializadora debemos ir restándolo de lo que hemos pagado por la instalación fotovoltaica, así poco a poco amortizamos las placas solares.

Los que estamos en autoconsumo fotovoltaico tenemos un beneficio añadido. Es la compensación de los excedentes que las empresas comercializadoras tienen la obligación de realizar a sus clientes. Esto significa que la electricidad que generamos y no consumimos, la vertemos a la red y la contabilizamos con un contador. La empresa comercializadora descontará la energía vertida a la red de la que hemos consumido de esa misma red, en horas que nuestras placas solares no producen suficiente. Y lo veremos reflejado en la factura de la luz.

El tercer beneficio es también económico, es el llamado autoconsumo bonificado. Algunas comercializadoras están pagando unos céntimos de euro por la energía eléctrica vertida a la red, además de compensarla. Esto significa que un poco de dinero vamos a recibir por la energía eléctrica que nos sobra. ¿Podemos ganar dinero con ello? No, este reembolso es solo un reclamo para atraer a clientes que se suman al autoconsumo en España. Pero no son cantidades para justificar la inversión. Además, la legislación y las comercializadoras imponen límites, con el fin de controlar que realmente sea un autoconsumo fotovoltaico.

El último motivo destacable es el beneficio que estamos haciendo al medio ambiente. Al generar electricidad a partir de una fuente renovable de energía como es el sol, no consumimos energía nuclear, o generada en centrales de carbón, o de ciclo combinado. De esta forma estamos reduciendo la cantidad de CO2 que emitimos a la atmósfera, y ayudamos a frenar el calentamiento global y el cambio climático.

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Para medir la rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos en nuestra vivienda, debemos fijarnos en varios puntos. Todos ellos afectan en menor o mayor medida la rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos.

En los últimos años, gracias a las nuevas tecnologías, a los métodos de fabricación mejorados y a las economías de escala, el precio de los paneles solares ha ido descendiendo.

Con el incremento del número de instalaciones, las empresas instaladoras han mejorado y optimizado sus métodos de montaje, al mismo tiempo que han ganado experiencia. Esto ha supuesto que los instaladores aporten un mejor servicio de asesoramiento, estudio e instalación, a precios muy competitivos.

El sector fotovoltaico está creciendo y esto hace que el número de empresas instaladoras haya aumentado, generando una competencia que ayuda a controlar los precios y que no se disparen. Incluso, los precios de las instalaciones fotovoltaicas se pueden ver reducidos por dicha competencia.

No obstante, no debemos confundir esa competencia "sana" con una presión para que nos rebajen los precios al disponer de varios presupuestos. Es bueno pedir presupuestos a 3 empresas para comparar entre ellas, y decidirnos por la que nos ofrezca una relación entre calidad de productos, servicio y precio mejor. Nunca aprovechar los presupuestos para presionar en los precios. Eso solo nos llevará a un peor servicio, peores materiales o instalación inadecuada.

La vida útil de las placas solares está entre los 25 y los 30 años. Un plazo de tiempo más que suficiente para amortizar la instalación fotovoltaica, y que la rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos sea significativa. También hay que mencionar que las baterías solares, que hasta hace unos años apenas duraban 4 o 6 años, ahora tienen una vida útil mayor. Y sobre todos si hablamos de las baterías de litio, que pueden vivir tanto como las placas solares.

Otro aspecto a tener en cuenta para mejorar la rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos son las ayudas directas o indirectas que las Administraciones Públicas están dando. Algunas directas por la instalación en energías renovables, y otras indirectas como reducciones en el IBI, por parte de los Ayuntamientos.

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Cuando hablamos de la rentabilidad de los paneles solares fotovoltaicos nos referimos al tiempo que tardaremos en recuperar el dinero invertido. Aunque también debemos añadir a la definición los beneficios que nos dará la instalación hasta el final de su vida útil. Para saber si las placas solares fotovoltaicas son rentables o no, debemos fijarnos en dos factores principales:

- El periodo de amortización de las placas solares

Por periodo de amortización entendemos el tiempo necesario para recuperar la inversión realizada. Esta suele estar entre los 6 y 8 años, aunque dependerá de cada instalación, los hábitos de consumo y otros factores.

- Estimación del beneficio neto de la instalación fotovoltaica

La estimación del beneficio neto es la cantidad de dinero que nos ahorramos, desde la puesta en marcha de las placas solares hasta el fin de su uso. Por lo general serán unos 25 años.

Para realizar el cálculo de la rentabilidad fotovoltaica, los instaladores tienen en cuenta dos factores básicos; el precio total de la instalación y el ahorro energético anual.

La fórmula básica para el cálculo del periodo de amortización es:

En cuanto al beneficio neto que nos proporciona la instalación fotovoltaica es:

Los instaladores nos presentarán un informe en el que realizan estos cálculos de forma más detallada y precisa. No obstante, la estimación del ahorro anual es muy difícil de hacer y para ello necesitan examinar nuestras últimas facturas de luz. Ya que dicho ahorro depende mucho de los consumos que hacemos cada uno de nosotros, de la evolución del precio de la luz o la capacidad de producción de las placas solares, entre otros aspectos.

Debemos tener en cuenta que el precio de la instalación fotovoltaica también puede condicionar tanto el período de amortización como el beneficio que pueda aportar. Es por ello que, es muy importante la elección de los componentes adecuados, como el inversor, y realizar los cálculos correctos de la potencia necesaria para la instalación.

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El coste de la instalación fotovoltaica puede parecernos un gasto inicial alto. No obstante, debemos considerar que desde la puesta en marcha de las placas solares estaremos ahorrando energía eléctrica. La amortización fotovoltaica se produce cuando el dinero que nos hemos ahorrado se iguala a la inversión realizada. Esta podemos deducirla con un sencillo cálculo, teniendo en cuenta dos factores:

El coste de la instalación fotovoltaica variará en función de varios factores, como el tipo de placas que nos propongan los instaladores, el inversor o la estructura fotovoltaica y de la superficie que necesitemos para generar la potencia que consumimos.

En cuanto al tamaño de la instalación adecuado a nuestro consumo, depende de otros factores.

De esta forma, el precio total de la instalación fotovoltaica se ve afectado por todos estos aspectos o factores. **A este precio podremos restar las ayudas que luego podamos conseguir**, tanto directas por la instalación de energías renovables como las indirectas como reducciones en el IBI. Las subvenciones que se conceden para este tipo de instalaciones pueden llegar al 30% del precio total de la instalación.

Gracias a estas ayudas o subvenciones nuestro periodo de amortización se verá reducido y los beneficios totales aumentarán. No obstante, los beneficios totales no los conoceremos hasta que la instalación de placas solares fotovoltaicas llegue al final de su vida útil. Aunque si podremos ir viendo cada año que ahorro hemos conseguido.