8 formas de financiar mi instalación de placas solares

• ¿Cómo financiar las placas solares?
• ① Créditos fotovoltaicos
• ② Ampliación de la hipoteca
• ③ Préstamos al consumo
• ④ ¿Qué es el renting de placas solares?
• ⑤ Financiar las placas solares a través del instalador
• ⑥ ¿Qué es el leasing de placas solares?
• ⑦ Crowfunding para financiar las placas solares
• ⑧ Cooperativas fotovoltaicas
• Comparativa: formas de financiar las placas solares
• ¿Qué es más interesante, el leasing, el renting o la compra?
• Subvenciones estatales en España para la energía solar

Ante la decisión de invertir en futuro e instalar un sistema de placas solares fotovoltaicas en nuestra vivienda, debemos conseguir el dinero para su montaje. Para ello existen diferentes opciones, empezando por disponer del dinero para comprar los paneles fotovoltaicos sin ninguna ayuda. No obstante, si no disponemos de todo el dinero aún tenemos la opción de unirnos al autoconsumo. Opciones como el préstamo al consumo, ampliación de la hipoteca, créditos fotovoltaicos, renting, leasing, crowfunding para placas solares, cooperativas fotovoltaicas, etc.

Aun así, lo más importante es que una empresa fotovoltaica con experiencia nos realice un estudio para comprobar la rentabilidad de las placas solares. Ya que en función de nuestro consumo y del espacio disponible para los paneles solares con la orientación e inclinación correctas, conseguiremos un ahorro adecuado. Una vez tenemos claro que las placas fotovoltaicas nos aportan un beneficio es cuando tenemos que buscar como financiar las placas solares.

En algunas ocasiones, aunque dispongamos del dinero para realizar el trabajo no debemos desestimar acudir a financiar la energía solar. Aunque tengamos el coste añadido de los intereses, es algo que debemos evaluar, para no quedarnos sin liquidez. Ante esta decisión, desde Hogarsense queremos ayudar con una serie de opciones que tenemos disponibles.

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Hay muchas entidades financieras que desde hace algunos años disponen de préstamos o créditos enfocados a este tipo de instalaciones. Bien nombrados como líneas de financiación verde o préstamos para la eficiencia energética. En el fondo son un producto financiero mediante el cual podemos financiar las placas solares para nuestra vivienda o negocio. Tienen la característica que los intereses son relativamente bajos y las condiciones buenas para que muchas personas nos animemos a pedir un presupuesto de placas solares.

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Otra opción que disponemos es la ampliación de la hipoteca. Aunque esta opción no es aceptada por todos los bancos. Además, en función de nuestra situación no podemos acceder a financiar las placas solares ampliando la hipoteca de la vivienda. No obstante, no debemos descartarla como opción disponible cuando pidamos un presupuesto de placas solares para sumarse al autoconsumo en nuestro país.

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Aunque los préstamos al consumo son una opción que podemos utilizar, al financiar las placas solares con ellos aumentamos demasiado el coste de los intereses. Ya que este tipo de préstamos suelen tener unos costes mayores a otros tipos de financiación.

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Algunas empresas instaladoras ofrecen el servicio de renting de placas solares. De forma sencilla podemos decir que es como un alquiler. La empresa instaladora realiza todo el trabajo y asume el coste de los paneles solares, y establece en el presupuesto de placas solares y en el contrato posterior el alquiler que deberemos pagar. En este caso, la instalación nunca será nuestra, solo nos beneficiamos de la energía eléctrica que produce, y pagamos un alquiler mensual mientras dure el contrato o su vida útil.

La opción del renting nos ofrece a los usuarios otros servicios adicionales, como son el mantenimiento de las placas solares, los recambios y reparaciones que se necesiten. De esta forma los usuarios no tenemos que preocuparnos de nada, simplemente aprovechar los rayos de sol para generar electricidad.

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Algunas empresas instaladoras ofrecen el servicio de asesoramiento y financiación cuando aceptamos el presupuesto de placas solares que nos han preparado. Nosotros no nos preocupamos de nada, y el instalador nos repercute el interés correspondiente en el precio de la instalación. En algunas ocasiones la financiación proviene directamente de los fondos de la empresa, en el caso de grandes instaladores. Pero por lo general muchos instaladores tienen acuerdos con bancos para poder ofrecer a sus clientes una forma de financiar las placas solares.

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Otra opción que ofrecen algunos instaladores es el leasing fotovoltaico. Con esta forma de financiar la energía solar no necesitamos consular al banco. Ya que la empresa instaladora fotovoltaica que ofrece este servicio se hace cargo de la inversión inicial. De esta forma nosotros como clientes no tenemos que hacer ningún esfuerzo económico.

El pago de la instalación fotovoltaica se realiza en plazos establecidos en el contrato de instalación, incluso puede estar establecido ya en el presupuesto de placas solares. Así, la instalación es propiedad del instalador hasta que pagamos la última cuota, es entonces cuando nosotros nos convertimos en los propietarios de la instalación fotovoltaica.

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El crowfunding fotovoltaico no es más que un crédito o un préstamo similar al que ofrecen los bancos. No obstante, al financiar las placas solares con crowfunding los que nos dejan el dinero son particulares y pequeños inversores. De forma que las personas nos prestan pequeñas cantidades de dinero para que podamos instalar placas solares, a cambio de un pequeño interés financiero que se acuerda por contrato.

El coste del interés es más pequeño que el de los bandos, ya que no hay ánimo de lucro. Más bien el interés de las personas que prestan el dinero es por conciencia en algún tipo de actividad. En este caso las energías renovables.

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El último ejemplo o forma de financiar la energía solar para nuestra vivienda son las cooperativas de energías renovables o fotovoltaicas. Estas son asociaciones de consumidores que tienen como objetivo realizar actividades para el fomento de las energías renovables. Dentro de estas cooperativas podemos encontrarlas con diferente forma de funcionar.

Pueden ser que se recojan fondos para financiar las placas solares de algún miembro, y seguir con el resto, poco a poco. Pero lo más normal es que los socios se unan para hacer una demanda colectiva. De forma que el presupuesto de placas solares para todos sea elevado y que las empresas instaladoras ofrezcan precios más económicos.

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Cada una de las formas de financiar la energía solar tiene sus ventajas e inconvenientes. Por ello, cada una será interesante para nosotros por algún motivo. En el siguiente cuadro hacemos un resumen de las formas de financiación más importantes y algunas de sus características para poder decidirnos. No obstante, al solicitar un presupuesto de placas solares podemos aprovechar el asesoramiento fotovoltaico de las empresas para consultar si disponen de alguna forma de financiar las placas solares.

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Responder a esta pregunta depende de cada caso en particular y las posibilidades económicas de cada familia. Es por ello que desde Hogarsense siempre aconsejamos acudir a varios instaladores para que nos asesoren y nos realicen un estudio personalizado, además de un presupuesto de placas solares ajustado a nuestras necesidades. No obstante, cualquier forma de financiar las placas solares siempre va a conllevar un coste financiero. Esto va a hacer que la amortización fotovoltaica se retrase y necesitaremos más tiempo para beneficiarios del autoconsumo, aún siendo compensados los excedentes que tengamos.

Por ejemplo, en una instalación fotovoltaica en la que no se necesita financiar la energía solar, el retorno de la inversión en la mitad sur de la península es de unos 7 años. Al requerir algún tipo de financiación necesitaremos alrededor de 10 años. Para el norte peninsular siempre deberemos sumar un par de años, debido a la menor incidencia de radiación solar y la mayor cantidad de días de lluvia o nublados.

Comparando entre renting y leasing, también dependerá de cada usuario, ya que ambos tienen sus ventajas y sus puntos débiles. Por ejemplo, en el leasing, la instalación solar fotovoltaica termina siendo propiedad de nosotros, los usuarios. Por el contrario, el renting tiene como ventaja que la empresa se encarga de todo durante la vida útil de las placas solares. Se encarga del mantenimiento, reparaciones y otros trabajos que se necesiten. Aunque la instalación siempre la tendremos alquilada a la empresa instaladora, que es en definitiva la propietaria.

España al igual que otros países de la comunidad Europea con el fin de fomentar la energía solar y otras renovables ofrecen subvenciones a personas físicas y agrupaciones que pueden traer muchos beneficios. Para las instalaciones fotovoltaicas existe ayudas y subvenciones que pueden ayudar para financiar las placas solares.

Estas son como un empujón que nos facilita la decisión y reduce la necesidad de financiación. Aunque no debemos depender de ellas o esperar que se nos concedan, solo serán una facilidad más.