La inclinación de los paneles solares en una instalación de autoconsumo bien diseñada debe potenciar a generación en la estación de mayor consumo, o en su caso, llegar a un compromiso entre generación y consumo anual.
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¿Es fácil instalar paneles solares para casa unifamiliar?
Las viviendas unifamiliares son, por decirlo de algún modo, las mejores para disponer de una instalación de paneles solares. La principal ventaja es su gran disponibilidad de espacio. Algo que no ocurre en otro tipo de viviendas como los pisos.
La mayoría de las viviendas aisladas disponen de diferentes ubicaciones donde colocar las placas solares.
• Instalar paneles solares en tejado
El tejado es la opción más buscada, puesto que suele ser la zona más alta y por ese motivo, con menos sombras. Instalar paneles solares para casa en su cubierta apenas ofrece problemas de incidencia del sol, salvo por la chimenea, la antena de televisión y poco más.
En muchos casos la pendiente del propio tejado no es la idónea. Sin embargo, la pequeña perdida de eficiencia que supone tener una inclinación no óptima se compensa por no tener perdidas por sombras.
• Montar equipo de energía solar en marquesina parking
En las viviendas unifamiliares se suele disponer de una zona de parking, bien junto a la vivienda o al inicio de la parcela. Por lo general, los propietarios construyen una marquesina para aportar protección al vehículo. Tanto para evitar la incidencia del sol en verano, como las inclemencias de la lluvia o la nieve.
Estas marquesinas son un sitio ideal para ubicar sobre ellas placas solares para estas viviendas unifamiliares. Aprovechando un espacio que por lo general no suele tener otro uso.
• Colocar paneles fotovoltaicos en jardín
Otra opción disponible en este tipo de viviendas es la zona de jardín. También es normal que dediquemos parte del jardín para disponer de una zona de recreo, donde relajarnos o celebrar comidas familiares. Instalar el equipo de energía solar para casa en esta zona nos da la oportunidad de dotar de sombra para esas celebraciones.
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¿Cuánto cuesta instalar placas solares en casa?
El precio de las instalaciones de placas solares para viviendas depende de los componentes fotovoltaicos utilizados. Así, el coste puede variar tanto por la cantidad como por calidad de los elementos que forman el kit solar.
En función de la orientación en la que se pueden instalar y su inclinación, la eficiencia de los paneles puede variar. Además, también es importante hacer un análisis de la factura de la luz y su evolución en los últimos 12 meses. Este es un punto que desde Hogarsense siempre insistimos a las personas que nos consultan.
Las empresas de fotovoltaica necesitan evaluar el consumo eléctrico y según todos los datos analizados, realizan el cálculo de la cantidad de paneles solares que son necesarios. Sin embargo, en función del modelo de placa solar elegido, la cantidad puede variar, y con ello el precio de la instalación total.
• Paneles solares precios para casas unifamiliares
Instalación de autoconsumo | N° de módulos | Precio* | €/Wp |
Placas solares 2 kW | 3 - 5 | 4.000 – 5.000 € | 2 - 2,5 €/Wp |
Placas solares 3 kW | 4 - 6 | 4.500 - 6.000 € | 1,5 - 2 €/Wp |
Paneles solares 4 kW | 5 - 7 | 5.500 - 6.800 € | 1,37 - 1,7 €/Wp |
Placas solares 5 kW | 6 - 9 | 6.000 - 7.500 € | 1,2 - 1,5 €/Wp |
Paneles solares 6 kW | 7 - 10 | 6.800 - 8.000 € | 1,14 - 1,34 €/Wp |
Placas solares 7 kW | 9 - 12 | 7.500 – 9.000 € | 1,1 - 1,3 €/Wp |
* Precios de equipo de energía solar para casa orientativo. Precios de la instalación de paneles solares sin IVA.
¿Cómo funcionan los paneles solares para una casa?
Por lo general, todas las instalaciones de placas solares para viviendas funcionan de forma similar. Aunque dependerá si disponemos de un sistema conectado a red o totalmente aislado. Por lo que necesitaremos de una batería solar o no. Sin embargo, el resto del sistema trabaja siempre igual.
Los paneles fotovoltaicos tienen la propiedad de generar electricidad al incidirles la luz del sol. Si se conectan a un circuito eléctrico, se consigue generar una corriente eléctrica que podemos aprovechar en nuestra vivienda de forma directa o indirecta.
Por un lado, durante el día, si tenemos electrodomésticos funcionando, como el frigorífico o la lavadora, la corriente eléctrica que generan las placas solares la consumimos directamente. Eso sí, tras ser transformada de corriente continua a corriente alterna por el inversor solar.
Además, la electricidad que nosotros no necesitemos, el inversor solar se encarga de entregarla a la red eléctrica. Para no perder esta energía, deberemos renovar el contrato de suministro con la comercializadora para que nos apliquen el balance neto de autoconsumo. Esto te lo explicamos en el siguiente punto.
En cambio, por la noche, cuando nuestras placas solares no produzcan electricidad, el inversor se encargará de abrir el suministro desde la red. De esta manera nunca notaremos falta de electricidad. Además, el propio inversor nos puede informar quien nos está suministrando la electricidad en cada momento: si proviene de nuestra instalación fotovoltaica o, por el contrario, nos suministra la red eléctrica.
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En cambio, si nuestra instalación es aislada, es decir, nuestra vivienda está en el campo y no hay red eléctrica de suministro, necesitaremos de unas baterías de litio solar. Así, podemos decir que la instalación de placas solares aislada funciona de forma similar a la conectada a la red.
La única diferencia es que cuando no necesitamos electricidad, pero los paneles fotovoltaicos están generándola, el inversor se encargará de almacenarla en las baterías solares. De modo que por la noche podamos utilizarla y no nos quedemos a oscuras.
Así, podemos decir que la red eléctrica funciona como una batería virtual, similar a la que disponen las viviendas aisladas de la red de suministro eléctrico. Pero, ¿qué es una batería virtual? Te lo explicamos más abajo.
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Balance neto con placas solares para viviendas
El concepto de balance neto de autoconsumo fue introducido por el Real Decreto 15/2018. Este término hace referencia a la posibilidad de compensar los excedentes hasta que el balance entre lo consumido y lo compensado sea cero.
Para entenderlo mejor, tenemos que imaginar que la red eléctrica funciona como una enorme batería. De modo que toda la electricidad que las instalaciones de placas solares para viviendas no consumen en el momento, se “almacena” en la red.
En realidad, no se almacena, sino que es consumida por otro usuario. Así, nuestro balance de energía cedida va aumentando, acumulándose en esa batería virtual.
Sin embargo, la empresa comercializadora contabiliza esa cantidad de electricidad que nosotros hemos cedido. Así, nos la compensará en momentos en que nuestras placas solares no generen suficiente. De este modo, cuando la generación decae y el consumo eléctrico de nuestra vivienda supera la cantidad generada por los paneles fotovoltaicos, la empresa comercializadora nos resta el consumo.
Esta resta se realiza hasta la cantidad de electricidad que hemos cedido es totalmente compensada. Es decir, nuestro balance de electricidad cedida está a cero.
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Batería virtual con paneles solares para casa unifamiliar
Otra posibilidad que tenemos es aprovechar las tarifas eléctricas ligadas a una batería virtual. Esta modalidad es ofrecida cada día por más comercializadoras. Siendo un modo de captar más clientes y aprovechar la electricidad que estos generan con su instalación de autoconsumo, para vendérsela a otros de sus clientes cuando la necesitan.
La batería virtual que ofrecen las empresas comercializadoras aprovecha el concepto de balance neto aprobado por el gobierno. De manera que la empresa que nos suministra valora la electricidad que le cedemos, pero a un precio inferior al que ella nos venda cuando consumimos de la red.
Así, la comercializadora aprovecha el servicio de batería virtual para generar negocio y beneficios. Puesto que esa electricidad que nos ha “comprado” a nosotros, la vende más cara a otro cliente suyo.
Además, tenemos la posibilidad de usar dos tipos de baterías virtuales, dependiendo de la empresa con la que contratemos el servicio. Así, hay la posibilidad de realizar la compensación con la batería virtual en la misma vivienda. De modo que lo acumulado en esa batería durante el verano, lo aprovechamos en invierno, cuando el consumo es mayor que la generación de nuestro sistema fotovoltaico.
En cambio, si disponemos de una segunda vivienda en el campo o en el pueblo, en muchas ocasiones es más fácil realizar la instalación de autoconsumo en esta segunda vivienda. Así, podemos ligar la batería virtual de la vivienda unifamiliar con un piso en la ciudad. De este modo, compensaremos el consumo del piso gracias a lo generado y vertido con las placas solares de la vivienda unifamiliar.
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