Garantía de placas solares: nuestra tranquilidad

• ¿Qué es la garantía de placas solares?
• ¿Qué garantías tienen las placas solares?
• Aspectos de la garantía de instalación fotovoltaica
• ¿Qué es el rendimiento de un panel fotovoltaico?

La garantía que se nos ofrece en cualquier compra es muy importante, puesto que nos da la tranquilidad de que el producto tendrá una vida útil lo suficientemente larga. Y, por supuesto, la garantía de paneles solares ,junto al resto de equipos de una instalación de autoconsumo, nos asegura un funcionamiento óptimo durante muchos años.

Debemos tener en cuenta que los fabricantes disponen de las garantías en función de la confianza que tienen en los productos que diseñan y fabrican. Así, cuanto mayor sea la garantía de placas solares, inversores u otros componentes, mayor es la calidad de ese producto.

Sin embargo, un buen producto puede perder sus cualidades si no se manipula o instala de forma adecuada. Por ello, desde Hogarsense colaboramos con empresas de demostrada solvencia y profesionalidad, que ejecutan las instalaciones asegurando el máximo rendimiento.

Por lo general, los paneles solares suelen tener una vida útil por encima de los 25 años. Pasada esa edad su eficiencia disminuye por diferentes factores, al igual que ocurre con todas las máquinas, electrodomésticos, incluso con nosotros mismos, todo envejece.

No obstante, los fabricantes de paneles solares se esfuerzan en mejorar su eficiencia y alargar la vida útil. De hecho, hay algunos fabricantes que ofrecen, algunos de sus modelos de paneles solares, con una garantía de hasta 40 años. Disponer de un plazo tan grande confiere al cliente una gran tranquilidad.

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La gran mayoría de los profesionales, fabricantes e instaladores siempre hablan de tres tipos de garantía que debe tener un panel fotovoltaico. Sin embargo, para Hogarsense hay otro aspecto que también tiene cierta importancia, es la que se refiere a la solvencia del fabricante.

Debemos tener en cuenta que hay empresas que no fabrican realmente, aunque ellos se promocionen como empresas suministradoras de paneles solares. En realidad, dichas empresas llegan a acuerdos con fabricantes para que estos produzcan sus paneles, con determinadas especificaciones, y luego simplemente les incorporan la pegatina con su marca y las empaquetan con su logotipo. 

Es por ello que es muy importante tener en cuenta las siguientes garantías en los paneles fotovoltaicos:

La garantía de producto que disponen las placas solares debe cubrir todo el conjunto que forma el propio panel. Es decir, esta garantía cubre los posibles defectos que tenga el producto desde la fábrica, algún problema mecánico o que se produzca un desgaste fuera de lo normal.

Para garantizar la calidad, antes de salir de la fábrica, todos los paneles pasan por una prueba de fotoluminiscencia. En este test se verifica la integridad mecánica de todos módulos fotovoltaicos y de la calidad de las celdas solares que los componen. Esta prueba se realiza dos veces, antes y después del proceso de laminación.

Hay fabricantes que ofrecen para sus módulos solares garantías que solo llegan a los 10 años. En cambio, hay modelos de paneles solares que tienen hasta 30 años. Incluso ya hay algún fabricante que está tan seguro de la calidad de su producto que ofrece 40 años de garantía de producto. Eso nos debe dar gran tranquilidad, aunque el precio de esas placas solares sea algo más elevado.

Al igual que todas las máquinas, los paneles solares se degradan con el tiempo y van perdiendo eficiencia. Es algo normal que debemos asumir, sin embargo, el nivel de esa degradación o la perdida de eficiencia es algo que debe ser controlado y los fabricantes nos deben indicar cuál es la pérdida máxima.

De este modo, disponemos de otro valor para comparar dos o más modelos de paneles solares. Además, es un dato que nos sirve para determinar que no es más económico un módulo por tener un precio de compra más bajo. Ya que, si en 10 años pierde un porcentaje significativo de eficiencia, no producirá la cantidad de electricidad esperada.

Todo esto, provoca que un panel solar barato que pierda eficiencia rápidamente tardará más tiempo en amortizarse y nos proporcionará menor ahorro, que otro similar, cuya eficiencia se mantenga más estable y no se reduzca tanto. Como vemos, no todo está en el precio de paneles solares y, por lo general, lo barato sale al final caro.

La garantía de servicio es algo que no todas las empresas fabricantes o distribuidores ofrecen y supone un plus para decantarse por ese modelo o marca de panel solar. Gracias a esta garantía de la que disponen algunos modelos de paneles fotovoltaicos, el fabricante se hace responsable de los trabajos de reparación, sustitución o reembolso de los paneles que sean defectuosos durante el periodo de garantía.

Esto se aplica incluso cuando el problema se detecta ya estando instalados los paneles en nuestra instalación de autoconsumo. Con lo que todo el coste de mano de obra de quitar el o los paneles afectados también corre a cargo del fabricante o distribuidor que ofrece la garantía de servicio.

Existe otro dato que nos puede dar un punto más de tranquilidad sobre el buen hacer de un fabricante. Aunque no es algo determinante, la catalogación que hace la agencia Bloomberg y que queda plasmada en su lista de paneles solares Tier-1, nos da una referencia de los fabricantes que son económicamente más estables.

Este certificado no es sinónimo de calidad de los paneles fotovoltaicos, ya que lo que se mide es el estado financiero del fabricante. Es por ello que no debemos dejarnos llevar únicamente por este certificado y primero debemos comprobar que nos ofrecen las otras tres garantías.

Esta clasificación se basa solo en aspectos financieros del fabricante, como haber suministrado un mínimo de 5 MW (megavatios) de placas solares, en al menos 5 proyectos, y haber sido financiado por 5 bancos diferentes.

Sin embargo, el saber que un fabricante lleva más de 20 años, investigando, desarrollando y fabricando paneles solares, es un punto a tener en cuenta.

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Como usuarios o interesados en el autoconsumo no solo debe importarnos la garantía de las placas solares, sino que toda la instalación se haya ejecutado de forma correcta. Esa es la mayor preocupación de los usuarios: disponer de una instalación que nos aporte el máximo de electricidad durante el número máximo de años.

Es por ello que debemos comprobar la garantía de todos los componentes y la calidad del trabajo de la empresa instaladora:

Comprobar la experiencia y buen hacer de los instaladores, antes de decidirse por uno. En Hogarsense trabajamos conjuntamente con las mejores empresas del país para aportar ese grado de tranquilidad a las personas que nos consultan a través de nuestro formulario.

La calidad de los paneles solares y las garantías que ofrecen los fabricantes pueden variar de un modelo a otro y es importante que nos ofrezcan los tres tipos que hemos comentado. Además, deberemos fijarnos en la cantidad de años y la perdida de eficiencia de cada módulo que nos ofrezcan.

Por lo general, los fabricantes de inversores ofrecen una garantía de 5 años sobre sus productos. En algunos casos, podemos optar a una garantía extendida que puede oscilar entre 10, 20 e incluso llegar a los 30 años.

La estructura soporte de los paneles solares suele ser la gran olvidada, sin embargo, juega un papel muy importante. Su resistencia mecánica nos asegurará que los paneles estén adecuadamente fijados y no sufran de vibraciones que puedan causar microrroturas internas.

El material de las estructuras fotovoltaicas nos asegurará que no se oxiden y deterioren con rapidez. Debemos recordar que la estructura debe resistir tanto o más que las placas solares. De nada sirve tener módulos fotovoltaicos que tengan una vida de 30 años, y que la estructura se oxide o se deteriore en solo 15 años.

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En fotovoltaica hay dos conceptos que muchas personas suelen confundir y piensan que son lo mismo: el rendimiento y la eficiencia. Sin embargo, son conceptos que hablan de cosas diferentes y debemos saber identificarlos y diferenciarlos.

La eficiencia es un térmico que se usa en fotovoltaica para comparar celdas solares o módulos fotovoltaicos diferentes entre sí. De modo que se pueda diferenciar que panel, a priori, tiene más capacidad para generar electricidad.

Con la eficiencia de un panel solar podemos establecer la cantidad de vatios que dicho panel es capaz de dar por cada metro cuadrado, cuando es sometido a una radiación de 1.000 W/m2 de irradiancia y la temperatura de las celdas o del panel es de 25 °C. Es decir, en condicionas STC o estándar de laboratorio.

De esta manera, cuando tenemos dos paneles fotovoltaicos con diferente eficiencia, significa que uno de ellos es capaz de generar más electricidad con la misma superficie de captación. O lo que es lo mismo, necesitaremos menos superficie de paneles para generar la misma potencia eléctrica.

Por su lado, el rendimiento se emplea para conocer la cantidad de energía solar que se transforma en electricidad en una instalación de autoconsumo, en una planta fotovoltaica o parte de ella. Es decir, con el rendimiento sabemos lo bien o mal que una instalación de paneles fotovoltaicos está funcionando y si cumple con las expectativas y previsiones.

Por ello, cuando se habla del rendimiento total de una instalación de autoconsumo fotovoltaico, nos referimos a la relación entre energía solar recibida y la electricidad generada. En términos técnicos a esta relación se denomina Performance Ratio (PR) o relación de transformación.