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- ¿Qué son los radiadores y cómo funcionan?
- ¿Qué son los convectores eléctricos y cómo funcionan?
- ¿Qué son los emisores térmicos y cómo funcionan?
- Ventajas y desventajas de los radiadores, convectores y emisores térmicos
- Beneficios de cada sistema para las viviendas
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¿Qué son los radiadores y cómo funcionan?
Los radiadores son el principal complemento de los sistemas de calefacción. Los mismos pueden ser de agua o eléctricos y tienen como fin propagar el calor dentro de las estancias. Se pueden encontrar de dos tipos. Los radiadores de agua son el complemento perfecto de las calderas de gas. Estos obtienen el agua caliente a través de las tuberías que es calentada anteriormente por la caldera de gas y son los que producen el calor que necesitamos en las habitaciones. Su funcionamiento es bastante sencillo, ya que solamente necesita de agua caliente a una temperatura de entre 60 % y 70 % para poder funcionar.
Por otro lado tenemos los radiadores eléctricos. Estos funcionan exactamente igual que los radiadores de agua caliente. Solamente se diferencian en que, este tipo de sistema no necesita ni de una caldera, ni agua caliente. Los radiadores eléctricos como su nombre lo dice, funcionan con electricidad y, a diferencia de los radiadores de agua caliente, deben estar enchufados a una toma de electricidad.
¿Qué son los convectores eléctricos y cómo funcionan?
Un convector eléctrico es un sistema de calefacción que se encarga de calentar directamente el aire que traspasa por una de sus resistencias que es calentada por la corriente eléctrica. El aire es uno de los recursos naturales menos pesados y por su mismo peso es posible que ascienda por la convección y logre calentar las estancias. Este tipo de calefacción es bastante utilizado en España. Sin embargo, no para calentar grandes estancias, ya que su consumo puede resultar muy elevado. Los convectores logran calentar gracias a las resistencias el aire de las estancias en poco tiempo.
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¿Qué son los emisores térmicos y cómo funcionan?
Los emisores térmicos son un tipo de calefacción fija que funciona al estar conectada a una fuente de corriente eléctrica. Los emisores térmicos disponen dentro de su sistema de acumuladores que producen el almacenamiento de la energía eléctrica que será posteriormente utilizada en forma de calor. Entre los emisores térmicos podemos encontrar los estáticos y los dinámicos. Los emisores térmicos estáticos solamente se encargan de calentar el aire y los dinámicos se diferencian ya que tienen un ventilador integrado que ayuda a disparcir el aire caliente dentro de las estancias. Además, podemos tres tipos diferentes: estáticos, de aceite y cerámicos.
Diferencias entre los radiadores, convectores eléctricos y los emisores térmicos
Radiadores | Convectores eléctricos | Emisores térmicos |
Necesitan combinarse con un sistema que caliente el agua (caldera, bomba de calor) | Calientan directamente el aire que pasa por las resistencias, previamente calentadas con corriente eléctrica | Solo nos va a permitir calentar la habitación donde lo tengamos instalado (sistema fijo) |
Tienen una instalación muy simple | Son equipos con gran consumo de energía | Calefacción fija que funciona conectada a la corriente eléctrica |
Pueden ser eléctricos o de agua caliente | Son equipos que tienden a ser más ruidosos | Disponen de acumuladores que almacenan la energía |
Mantienen más tiempo el calor | Ligeros de transportar | Son más caros que los radiadores o convectores eléctricos |
Equipos de alta potencia y eficiencia | No necesitan de instalación | Son equipos bastante eficientes |
Ventajas y desventajas de los radiadores, convectores y emisores térmicos
Radiadores
Los radiadores son uno de los sistemas de calefacción más utilizados en España. Tienen una gran eficiencia energética y el consumo de los mismos es bastante bajo ya que la caldera a la cuál están conectados, necesita de gas para funcionar y el gas en la actualidad es uno de los combustibles más económicos del mercado.
Suelen generar bastante calor dependiendo de su potencia y es un calor bastante confortable. El precio de los radiadores en si, es bastante económico, solamente debemos tener en cuenta que también necesitamos de una caldera. El precio de la instalación es mucho más elevada que la de cualquier otro sistema. Sin embargo, presenta la ventaja de que es posible amortizarla en un par de años.
Convectores eléctricos
Los convectores eléctricos son sistemas de calefacción menos potentes con un consumo de energía bastante elevado. Disponen de una resistencia eléctrica que calienta el aire frío que entra por la parte inferior del aparato y lo expulsa por la superior cediendo calor al instante. Además, podemos regular la temperatura mediante un termostato. Este tipo de convectores pueden resultar muy cómodos para calentar habitaciones pequeñas como la cocina o el cuarto de baño.
El precio de los convectores suele ser al igual que los radiadores, bastante económicos. Su precio dependerá de la potencia de los mismos. Una de sus principales ventajas es que suelen calentar muy rápidamente si la estancia es pequeña como lo hemos explicado anteriormente. No necesitan de instalación alguna y su uso resulta muy cómodo ya que, son equipos muy ligeros de transportar.
Además, este tipo de sistema de calefacción, aparte del elevado consumo de electricidad, es que por lo general suelen ser equipos ruidosos, lo que podría resultar incómodo para aquellos usuarios que no tengan un sueño muy ligero y que pretendan más confort.
Emisores térmicos
Los emisores eléctricos son sistemas de bastante potencia y eficacia pero su fuente de energía es la electricidad lo que aumenta en los costes de los mismos. Al tratarse de ser equipos fijos son ideales para habitaciones que deben ser constantemente calentadas y se goza de bastante confort con los mismos. El precio de los mismos puede variar mucho, ya que todo dependerá del tamaño y la potencia de los mismos, lo que hace que sean más caros que los radiadores eléctricos o los convectores.
Este tipo de sistema de calefacción necesita de una pequeña instalación por separado en cada habitación, lo que puede elevar los costes de las misma. La instalación de este tipo de sistema puede ser provechosa si queremos evitar tener muchos radiadores en casa. Ya que los emisores térmicos pueden dar mejores beneficios en cuanto al calentamiento de las habitaciones según el tamaño de las mismas, mientras más grandes sean las habitaciones, mejor será tener una instalación de un emisor térmico dentro de las mismas.
Beneficios de cada sistema para las viviendas
Radiadores
Es un sistema que es muy ahorrativo en cuanto al precio del combustible, además de ser un dispositivo limpio. Los radiadores de agua caliente suelen ser perfectos para viviendas con muchas habitaciones y en las que se cuenta con una instalación previa. En cuanto a los radiadores eléctricos, también son recomendables para viviendas en las que no se necesita un radiador o sistema de calefacción en cada habitación.
Los radiadores eléctricos suelen utilizarse en muchas viviendas, ya que no se necesitan obras para la instalación. Resultan beneficiosos para aquellas viviendas que carecen de una instalación de tuberías para calefacción y en las que la adquisición de combustibles como el gas no sea tan fácil, por ejemplo segundas viviendas retiradas de la periferia de la ciudad.
Convectores eléctricos
Una de las características principales de los sistemas de calefacción por convector se relaciona con su recipiente aromatizador. Este dispositivo nos permite aprovechar el aire caliente generado por el aparato y al mismo tiempo mantener el aire del ambiente aromatizado con esencias naturales.
Emisores térmicos
Un emisor térmico es un equipo de calefacción completamente independiente que calienta de manera eficiente cualquier tipo de estancia. Son dispositivos respetuosos con el medio ambiente y la opción de elegir un tipo u otro de emisor térmico en función de las necesidades de cada persona. Los emisores térmicos que ayudarán a hacer un uso responsable de la energía y a reducir el coste de la factura eléctrica al evitar gastos innecesarios.
Como podemos ver, cada sistema tiene diferentes beneficios y pueden adaptarse para una u otra vivienda. Sin embargo es recomendable que se haga un análisis primeramente de la vivienda y de las necesidades de los usuarios. Además, se debe tener en cuenta el tamaño de las habitaciones que se necesitan calentar y el clima de la zona geográfica en la que se encuentre la vivienda. Ya que de allí podremos decidir por la potencia necesaria de cada sistema y obtener e confort deseado en los meses más fríos.
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